Esta pasada semana he estado invitado a formar parte del Jurado del prestigioso certamen internacional
Cerdá y Rico que se celebra anualmente en Cabra del Santo Cristo (Jaén).
Arturo Cerdá y Rico fue un fotógrafo aficionado que dejó a su muerte un legado fotográfico de incalculable valor, tanto artístico como etnográfico, que desarrolló desde finales del siglo XIX hasta principios del XX.
En honor a él se celebra todos los años éste concurso, el cual ademas de estar bien dotado económicamente, 6000 €uros en premios, tiene como principal misión difundir la fotografía artística.
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