Hay un objeto imprescindible que casi siempre cae en el olvido en la lista de accesorios de un laboratorio clásico de fotografía analógica en B/N: El tendedero de copias.
Aquí subo una foto del mío, un tendedero de ropa humilde re-acondicionado para la ocasión capaz de soportar estoicamente estando al límite y sin pegarse las copias el peso de 24 fotografías a las sales de plata recién lavadas en 18x24 cms y que pese a ello jamas recibí de el queja alguna. Ha sido, con enorme discreción, testigo de todos mis aciertos & errores fotográficos y conservo la sospecha de que con sus varillas de acero mas de una vez las copias han bailado junto a mi reblandecidas al ritmo de los Led Zeppelin ...
Jamás me desharé de el.
Sería como .... una traición.
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